Pasos atrás

· ¿Qué te pasa?

- ¿Sabes qué es? Soy idiota.

· ¿Por qué?

- Porque en vez de seguir para adelante y estar felizmente feliz, no hago más que mirar el pasado.

· Yo creía que con tu nueva pareja todo es alegría y diversión.

- Lo es y estoy muy, muy bien; pero hay algo que...no sé explicártelo...Es como si hubiera algo entre tú y yo que no está por terminar. Sé que no lo debería hacer y que es cosa del tiempo; que ya todo es imposible, pero a veces no deja de sonar en mi cabeza las últimas palabras que me dijiste cuando me fui “Pronto nos veremos. Te quiero”.

· Yo también sigo teniendo esa expresión, de hecho, te voy a contar algo curioso.
Estuve hablando con un amigo por teléfono y le dije que por mucho que tengas nuevas parejas en tu vida, yo personalmente me acordaba siempre de ti y de los buenos momentos pasados. Él me decía que eso es una gilipollez por mi parte porque debería pasar página. Pero yo le dije que me es imposible y que me niego a olvidarlo. Parece que es tu caso y el mío.

- Me pasa lo mismo....La cosa es que no sé porqué, pero yo sé que estás igual que yo, lo se...porque lo siento, porque te siento…Siempre te dije que nunca dejaría de quererte...Por muchas parejas que pueda tener, lo nuestro es algo...inexplicable, no te sé decir....Fue algo mágico.

· Si.

- Es algo que hay que “olvidar”, pero es imposible, no puedo; y no es que no pueda, es que no quiero. Pero no vamos a estar toda la vida así…por eso te dije que quería verte, necesito “terminar” esto.

· Tranquila, ahora si que podemos; antes nos pilló…quizás un poco jóvenes.

- Si, pero pase lo que pase estamos lejos y es lo más jodido.

· Si, pero bueno. Desde mi punto de vista, a más edad, más facilidades.

- Sólo quiero que sepas que esté con quien esté, como en el caso de ahora (no estoy porque sí, sino porque es algo que siento), pues que siempre querré verte, vale ? Y pase lo que pase, siempre te voy a querer; es algo que no se va a ir de mí.

· Lo sé, lo mismo te digo.

Falso espejo...

Fueron sueños que tuvo en cada momento,
momentos que vivió como si sólo fueran sueños.
Realidades más ciertas que pensamientos...que pronto ocurrieron;
sentimientos en su interior tan falsos como sinceros
y sólo una felicidad mal reflejada en el espejo.

Era una sonrisa que se dibujaba en su cara,
ya no eran aquellas lágrimas que derramaba;
había algo en ella que fallaba,
su alegre mirada me engañaba.

Y allí estaba tan triste sentada,
pensando en si sentía;
en si sentía lo que pensaba.
Tan sólo me dijo unas breves palabras,
y es que era su amor lo "poco" que ocultaba.

"No sé lo que estoy haciendo, no sé lo que me está pasando, sólo sé que necesito de su cariño y no quiero perderla...estoy tan agusto con ella...no puedo explicar nada con palabras, porque nada tendría sentido, es algo que lo hace tan especial todo, es la otra mitad que me faltaba para llenar el hueco que le quedaba a mi vida; pero es por otra parte en la que no sólo pienso, sino que siento que...me duele decirlo, no puedo"

"Digas lo que digas te escucharé e intentaré ayudarte en todo lo que pueda, adelante".

"Siento que no tengo nada que hacer, que por una vez sé que es el tiempo el que me lo dirá todo, el tiempo y la situación que haga yo tener con ella...Sólo es cuestión de...¿días, meses, años?
Puede que me equivoque, pero...lo siento en mi interior...Intento guardar y hacer que no descubra la realidad que se esconde tras este falso espejo; falso espejo que hubo desde que te volví a decir que estaba enamorada.

Nunca me olvidé de ti, siempre quise estar contigo...y ahora, ahora creo que estoy jugando, jugando con algo que no debería...se trata de sus sentimientos, en los que cuando estoy con ella compartimos...
Ya no sé si los te quiero que salen de mi boca producen el sonido que ella quisiera escuchar...
De lo único que estoy segura es de que mi propio corazón solamente te pertenece a ti.

No se me dio bien aprender a conquistar, no se me dio bien escribir todo lo que quería decirte.
No se me dio bien quedar contigo y lanzarte mil palabras con los ojos brillantes mientras me mirabas...
No se me dio bien cambiar de persona, no se me dio bien seguirte cuando tú querías...
En resumen, no se me dio bien ser yo misma.

Puede que sea arrepentimiento o puede que no...Puede que lo que te cuente sea una tontería, una paranoia o simplemente una confusión...Ahora me perdí en mi misma...

No sé lo que estoy haciendo, no sé lo que me está pasando, sólo sé que necesito de tú cariño y no quiero perderte...estoy tan agusto contigo, no puedo explicar nada con palabras, porque nada tendría sentido, eres algo que lo hace tan especial todo, eres la otra mitad que me faltabas para llenar el hueco que le quedaba a mi vida; y es por otra parte en la que no sólo pienso, sino que siento que..."

"Te quiero..."

"Casada" de blanco

Y verla en aquella cama de sábanas blancas como el futuro vestido que tendría al casarse de nuevo 50 años después; y que en su noche de bodas, en la puerta de la sala, le estaría esperando su amado “Romeo”...con los brazos abiertos, recibiéndola en su llegada.
Y en ella se dibujaría una sonrisa por volver a recordar su día blanco de años atrás;
y en ella aparecería una lágrima de alegría, por saber que todos allí están.

Pronto caería al suelo y su velo le cubriría toda aquella vida cruel que sufrió al nacer.

Recuerdo en sus días que era como una niña, que jugaba cuando los demás no estaban, que me regalaba lo que ninguna otra mujer, a su edad, podría regalarme.

Y es hoy cuando aún sé que está y que falta poco más de una semana para casarse, para llegar de blanco a aquel mundo que dejó. Y pensar lo que ella pensaba, que aquél GRAN HOMBRE la iba a cuidar...pero al encontrarse en sus sueños “de no despierto”, se acordaría de lo que dejó atrás.

Sé que en su mente aún me cuida, sé que cuando me mira yo la veo más. Sé que no di todas las fuerzas que tuve para poderla volver a salvar.

Hoy es noche de reyes y un regalo traerán: “el nacimiento de alguien que en un futuro morirá”.

La de ayer

Sí, si tú fueras hoy la de ayer, la de no conocerte, la de volver a creer que tenías tanto interés por saber que era yo, “la nueva”. Y que tras pensar lo que siempre había conseguido con unas palabras hacía los demás, llamar la atención, llamar la atención por primera vez para que me hicieras caso…Me diste a entender mil imágenes que se proyectaron en mi cabeza, mil momentos que nunca llegarían a ser, mientras a voces de grito sonaba tu primera canción en mi habitación y relacionaba tu voz con tus gestos, tus ojos con tus “besos”...
Llevaba echándote de menos desde siempre, pero siempre se convirtió poco a poco en el “nunca” del tenerte. Y todo se envolvió pronto de un frío húmedo que no llegué a comprender jamás. Sé que posiblemente fue un error y lo sentí; aún así, todo siguió igual. Sólo quería conseguir algo, cuyo significado nunca entenderás. ¡Quedó tanto por escribirte tantas veces!

Sí, si tú fueras hoy la de ayer, la de no conocerte, la de volver a creer que tenías tanto interés por saber que era yo, “la nueva”, nunca hubiera intentado llamar la atención con unas palabras.